11 de septiembre, 2010
Bajo el título “Por María, madre de la unidad”, el Rector del Santuario de Fátima reflexiona en el editorial del órgano informativo de la institución sobre el viaje apostólico del Santo Padre Benedicto XVI al Reino Unido (16 a 19 de septiembre de 2010). En la edición de septiembre del periódico mensual “Voz da Fátima”, el Padre Virgilio Antunes recuerda que el “diálogo doctrinal (entre las Iglesias Anglicana y católica), siempre difícil, es continuado y tiene dado algunos frutos, expresados en las declaraciones conjuntas producidas por las comisiones para ese efecto constituídas”. Reconoce entretanto que “otra parte de la Iglesia Anglicana camina en el sentido de las grandes fracturas, sobre todo en temas pastorales y morales”. En este sentido, la visita de Benedicto XVI al Reino Unido se figura, considera el Rector, como “importantísima”, “por el hecho de ser una nación mayoritariamente anglicana, con una enorme influencia en el mundo entero y por ser uno de los dos grandes focos del diálogo ecuménico en el que está envuelta la Iglesia Católica”. “El Papa Benedicto XVI parece decidido a abrir las puertas de la Iglesia a todos los que, en virtud de las circunstancias históricas, se encuentran fuera de la plena comunión católica, como ya demostró en medidas tomadas en diferentes direcciones. Él sabe que el peso de los siglos, aliado al de las instituciones fuertemente estructuradas y las razones de orden sentimental, acaba por ser mayor que el de la teología o la doctrina, de la reflexión y de la razón. Sabe, por eso, que son importantes las señales y gestos de aproximación, diálogo y disponibilidad que, siendo propuestas, manifiestan el deseo del reencuentro y de la unidad”, escribe el Padre Virgilio Antunes, en la edición con fecha de 13 de septiembre. A propósito de la devoción a María, el Rector recuerda que “tanto en el mundo católico como en el mundo anglicano es grande la devoción mariana; de un lado y de otro se asume y profesa la palabra del Evangelio, según el cual todas las generaciones han de proclamarse dichosas”. Destaca también “que hace ya algunas décadas se vienen desenvolviendo algunos núcleos de devoción a Nuestra Señora de Fátima entre los miembros de la Iglesia Anglicana”. “Confiamos, por eso, que por las manos de María han de estrecharse los lazos de la unidad”, concluye el Rector. |