21 de febrero, 2025
![]() La Procesión de las Velas ahora se realiza todos los días en el Santuario de FátimaDebido a la presencia regular de grupos de peregrinos en el Rosario de las 21:30 horas, el Santuario ahora celebra diariamente este momento emblemático de celebración de Fátima.
La procesión de las velas, después del rezo del Rosario de las 21:30 horas, en la Capilla de las Apariciones, se realiza desde principios de este mes de febrero diariamente, durante todo el año, y no sólo entre Pascua y Adviento, como ocurría. Este cambio es fruto de la concienciación del Santuario ante la presencia cada vez más regular de grupos de peregrinos durante todos los meses del año, no limitándose sólo a los meses de mayor afluencia. Esta realidad la confirman las estadísticas sobre la presencia de peregrinos en el Santuario en 2024, que indican un aumento del número de grupos organizados de peregrinos y una progresiva difuminación de la estacionalidad en Cova da Iria, evidenciada por la tendencia a la creciente presencia de peregrinos entre noviembre y abril, fuera del período de las grandes peregrinaciones internacionales. Como sucedía hasta ahora, la Procesión de las Velas seguirá dependiendo únicamente de las condiciones meteorológicas que se verifican en el momento. Con este cambio, los grupos de peregrinos podrán inscribirse para llevar el paso durante todo el año, simplemente contactando con los servicios del Santuario de Fátima o contactando con [email protected]. La Procesión de las Velas es uno de los ritos más emblemáticos de Fátima. Durante las grandes peregrinaciones, que tienen lugar entre mayo y octubre, esta procesión lleva la imagen de Nuestra Señora hasta el altar del Recinto de Oración, en la noche del día 12. El resto de días la procesión sigue un recorrido por el Recinto de Oración, regresando a la Capilla de las Apariciones. Organizada en Cova da Iria en la segunda mitad de la década de 1920, la Procesión de las Velas tiene su origen e inspiración en la tradición del Santuario de Lourdes, en Francia. En Fátima, se remite a los peregrinos al simbolismo de la luz, que es expresión de lo divino en las apariciones de Fátima. |